Orar y acompañar la alarmante situación económica y social

Miles de comercios y empresas cerraron como consecuencia de la situación económica del país. Foto: SobreviviendoFM

 

BUENOS AIRES / Argentina (LWI) – Líderes y lideresas de las iglesias que forman parte de la Federación Luterana Mundial (FLM) de Argentina se mostraron sensibilizados, preocupados y comprometidos en acompañar y orar junto a las personas que sufren “el resultado de la injusticia y crueldad de los poderosos”. Las manifestaciones se dieron a partir de la profunda crisis económica y social que atraviesa el país producto del desempleo, la deuda, la inflación, el aumento de la pobreza y la inestabilidad financiera, entre otras cosas,

Los Rev. Gustavo Gómez y Leonardo Schindler, pastores presidentes de la Iglesia Evangélica Luterana Unida (IELU) e Iglesias Evangélica del Río de la Plata (IERP), se mostraron movilizados y atentos a la situación actual de su país, que se encuentra al borde de incumplir con los préstamos en pesos y dólares, estando en medio de una crisis que afecta la economía de las familias por la caída del empleo con un 10 % de desocupados, el cierre de más de 23 mil empresas, la inflación disparada que se estima en 65 % para este año, el aumento de las tarifas de electricidad, gas y agua potable en más de 3.000 por ciento y  la inestabilidad financiera, que muchos describen como “alarmante”.

“Parece mentira, otra vez gobiernos con políticas neoliberales llevan al país al precipicio. Otra vez el Fondo Monetario Internacional, las calificadoras de riesgo más prestigiosas del mundo y la banca internacional asesoran y alientan este verdadero saqueo”, opinó el Rev. Gustavo Gómez, que comparó la situación con la reflejada en el Antiguo Testamento, cuando “el pueblo de Israel reflexiona sobre sus calamidades en el exilio y se da la oportunidad de hacer una profunda autocrítica con sus acciones, y por supuesto las acciones de las personas más poderosas, la que trajeron esa ruina”, manifestó. 

En ese mismo tono se expresó el Pastor Presidente de la IERP, Rev. Leonardo Schindler, que evaluó que “lo ocurrido es resultado de políticas que no analizaremos ahora, pero que no pueden ni deben repetirse nunca más”.  “Del mismo modo, nos preocupa el recrudecimiento de la violencia institucional y social”. “Solo es de esperar que esta crítica solución se resuelva con más y mejor democracia, que no se agiten fantasmas destituyentes ni tampoco se promuevan estallidos sociales, porque cuando esto sucede los que pagan los platos rotos son siempre los mismos: los más débiles”, puntualizó. Ambos líderes coincidieron en la necesidad de acompañar, “tendiendo la mano solidariamente a todas las personas que sufren” y orando “para que quienes sean electos en la próxima elección asuman la defensa de los intereses del pueblo, y haciendo uso de la autoridad que le es otorgada constitucionalmente, reconstruyan la casa que es nuestro país, a fin de que en él todos y todas tengan un lugar y nadie quede excluido”, tal como analizó Schindler.

Uno de los sectores que más sufre son los y las jóvenes, por lo que el Coordinador Juvenil de la IERP Romario Dohmann manifestó que “la crisis desorganiza la vida, la posibilidad de planificar un futuro y construir para lograrlo”, puntualizando que debido a la situación actual del país, “hoy ni siquiera tener un título universitario nos asegura no pasar por necesidades”. En ese mismo sentido, Rocío Cheuque, lideresa juvenil de la IELU, manifestó “personalmente no estoy encontrando un movimiento que me represente. Además, estoy notando gente de mi edad y un poco más grande que tienden a preocuparse mucho por lo económico-político y todo lo demás ya no es tan importante”. La preocupación también fue compartida por la joven Ailín Montí de la IERP, que expresó un pedido a Dios: "oremos por la conciencia social, porque las personas se informen y que esa forma no sean tan permeables a los medios masivos de comunicación que más que informar, desinforman en pos de los intereses de unos pocos que tienen el control y el poder", dijo. "Oremos por la responsabilidad ciudadana de jóvenes y adultos, que la respuesta no sea que la política no sirve, sino más bien que somos responsables unos y unas de otros y otras... y esa es la única política que debe regirnos".

Red de Comunicaciones – LAC