La voz de las Iglesias ante la crisis de Argentina
BUENOS AIRES / Argentina (LWI) – La Argentina se encuentra viviendo un momento crítico en el contexto de la aprobación de una Ley de reforma jubilatoria, que prevé recortes del presupuesto para jubilaciones y programas sociales a partir del año próximo. Hubo manifestaciones de la población en diferentes puntos del país en contra de la medida, al tiempo que se desató fuertes represiones y persecución por parte de las fuerzas de seguridad. En ese contexto, los Pastores Presidentes de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata (IERP) e Iglesia Evangélica Luterana Unida (IELU) hicieron un llamado de atención, manifestaron su preocupación y denunciaron lo que consideraron un retroceso a los derechos de los más desprotegidos, así como también condenaron la violencia por parte de las fuerzas de seguridad, la persecución y las agresiones cruzadas que se pudieron ver a lo largo de la jornada de 18 de diciembre.
Mientras que la Cámara de Diputados debatía y se encaminaba a aprobar la reforma jubilatoria, que traerá como consecuencia la quita de por lo menos 68 mil millones de pesos (cuatro millones de dólares) a las jubilaciones y diversos programas sociales para próximo año, miles de manifestantes se dirigían a las calles y plazas para manifestar su oposición y en varios puntos eran reprimidos por la policía y fuerzas de seguridad, los Rev. Carlos Duarte y Gustavo Gómez, Presidentes de la IERP y IELU respectivamente, se mostraron preocupados por la militarización de los espacios sociales, la represión, la persecución a periodistas y manifestantes, así como también las diversas manifestaciones es violencia que se vivieron en el país durante la jornada.
“Desde hace 500 años la tradición luterana reconoce y sostiene que la ley debe ser un dique de contención frente al mal y que el Estado es el legítimo responsable de administrar ese poder y plasmar esos acuerdos”, sintetizó Gomez en su declaración. “Viendo las imágenes de grupos de policías golpeando brutalmente a ciudadanos desarmados, es inevitable volver a preguntarnos ¿quién vigila al que vigila? ¿Quién controla al que controla? Mi sensación es que la población está a merced de bandas mafiosas de uniforme actuando según sus pulsiones más oscuras, con el aval de las autoridades políticas”, concluyó.
En ese mismo sentido, el Pastor Presidente de la IERP, Rev Carlos Duarte, hizo una reflexión en la que señaló que “el que siembra vientos cosechará tempestades” citando Proverbios 22, 8 del Antiguo Testamento. En su llamado, Duarte indicó que la presencia de la Gendarmería Nacional, el vallado alrededor del Congreso de la Nación y la actitud agresiva de esta fuerza, tanto hacia las autoridades legislativas como hacia los manifestantes, predispuso la reacción violenta de unos pocos: “desde lo simbólico, vallar el Congreso es como cerrarlo, y la violencia ejercida sobre los manifestantes es un atentado a la vigencia del estado de derecho puesto que fue organizado, planificado y ejecutado bajo órdenes del Poder Ejecutivo Nacional. La consecuencia se dejó ver el lunes donde grupos minoritarios fueron a demostrar que no se dejarán amedrentar”, continuó y finalmente señaló que “es hora de cortar la espiral de violencia y eso no se logrará deteniendo a indigentes, a transeúntes ajenos a la manifestación, agrediendo física y psicológicamente a legisladores y asesinando por la espalda a un joven mapuche… nuestra iglesia, si desea ser fiel al mandato de Jesucristo, y a la Escritura, debe elevar su voz de protesta en defensa de los derechos humanos” finalizó.
La nueva Ley establece una rebaja en por lo menos 68 mil millones de pesos (cuatro millones de dólares) a las jubilaciones y diversos programas sociales para 2018. Cabe señalar que, si bien hubo encapuchados, vándalos y agresores, la represión fue muy fuerte, se desató persecución de manifestantes, agresión a trabajadores de prensa, corridas por toda la zona, lanzamiento de gases lacrimógenos, e incluso disparos con balas de plomo por parte de la policía.
Red de Comunicaciones - LAC
