La IELCO cumple 80 años de historia
BOGOTA / Colombia (LWI). La Iglesia Evangélica Luterana de Colombia está celebrando sus 80 años, recordando los hechos más importantes de su rica historia, que comenzó en el año 1.936, cuando llega el Evangelio de Jesucristo a Colombia, traído inicialmente por Myrtle Nordin y María Thompson, dos mujeres procedentes de Minnesota EE.UU, cuya misión tuvo que ver con la evangelización y la ayuda en las regiones más apartadas del país.
La historia de la Iglesia:
Luego de que Myrtle Nordin y María Thompson llegaran a Colombia, vinieron otros misioneros para reforzar el trabajo iniciado en los Departamentos de Boyacá y Casanare. La misión evangelística se formó con el nombre de Colombia Evangelical Lutheran Misión Of South América-CELMOSA (1.936 - 1.948). Tuvo como sede inicial el pueblo de Soata – Boyacá- y de allí se extendió el trabajo de evangelización por los pueblos del norte de la provincia de Gutiérrez, Socotá y Casanare.
En 1.949 la misión tomó el nombre de Corporación Evangélica Andina, con personería jurídica del Ministerio de Justicia (No.20 del 17 de Febrero de 1.949). Con esta personería los misioneros norteamericanos ampararon las propiedades económicas, contrataron el personal y representaron a la iglesia ante el Estado Colombiano y los particulares. Hasta aquí los misioneros lideraron y administraron la iglesia, dando alguna participación a los nacionales. De 1.958 a 1.982, la iglesia tomó el nombre de Iglesia Evangélica Luterana Sínodo De Colombia.
Los misioneros norteamericanos en esta época capacitaron a líderes nacionales para que fueran asumiendo mayores responsabilidades en el trabajo de la iglesia. Se nombró como primer presidente del Sínodo al Rev. Pausanias Wilches. Los misioneros dotaron a las iglesias, misiones y colegios de instalaciones propias y con su programa de educación en los colegios e Instituto Bíblico Cultural, capacitaron a niños, jóvenes y adultos para el ministerio de la evangelización y servicio social.
A pesar de las dificultades causadas por la violencia político-religiosa de la época, la iglesia creció en número y en conocimiento de las Sagradas Escrituras como fuente de fe y conducta. Los pilares de la iglesia fueron: sola Escritura, sola Gracia, sola Fe y solo Cristo. Ya en el año de 1982, la iglesia tomó el nombre de Iglesia Evangélica Luterana De Colombia –IELCO-, nombre que continúa hasta el momento y que lleva en su historia el trabajo de misioneros y colombianos que depositaron su confianza en Jesucristo”. (Apartes tomados de la Revista - LaVoz Luterana – Colombia)
Pastoras y pastores capacitados en el servicio:
A lo largo de estos 80 años de historia, los pastores colombianos han tenido la oportunidad de estudiar en diferentes Seminarios Teológicos dentro y fuera del país, por apoyos brindados por la ELCA y la FLM. Otro aspecto importante es la formación de mujeres para el Pastorado, en el que se resalta el trabajo evangelístico realizado en diferentes regiones, consolidando y fortaleciendo la labor del Ministerio Nacional de Mujeres IELCO.
Testimonio del Pastor Gerardo Wilches
Cuando la Biblia llegó a mí Vereda, Santa Ana del municipio de El Espino -Boyacá, yo tenía 13 años de edad. Recuerdo que las biblias la llevó el Pastor Andrés Larson, en un viaje que realizó del municipio del Cocuy –Boyacá, todos en Santa Ana hablaban de las biblias y el Pastor fue el primer Misionero Luterano que nos visitó y nos enseñó cómo estudiarla. Cuando empezó la iglesia, eran tres familias, luego fueron agregándose otras, hasta que se formó un buen grupo y estudiábamos algunos versículos.
Nos reuníamos en los hogares, inicialmente lo hacíamos sin Pastor, ya que el Misionero Larson nos visitaba cada 2 meses. Lo hacíamos cada domingo en un lugar distinto y así sucedió por un tiempo, hasta que decidimos construir la capilla para congregarnos, en un lugar que nos dio mi padre para hacerla.
Recuerdo que también nos servía como escuela para nuestros niños, pues no se permitía que ellos estudiaran en escuelas oficiales. Por obra del Espíritu Santo -Pausanias Wilches y yo-, empezamos a dirigir las reuniones y hacer pequeños estudios bíblicos, tal vez ese fue el momento en el que Dios nos escogió para su Ministerio.
Bajo la dirección del Pastor Gerardo Ostrem en 1940, a Pausanias y a mí, nos invitaron para realizar estudios en el IBC (Instituto Bíblico Cultural) que funcionaba en el municipio de Duitama – Boyacá-, donde nos graduamos en 1947. Luego en 1951 fuimos enviados al seminario de CONCORDIA de Buenos Aires – Argentina-, donde fuimos ordenados como Pastores en 1955.
Durante el tiempo de la violencia en Colombia, también existía una lucha político-religiosa entre evangélicos y la religión tradicional. Recuerdo que cuando murió mi hermano, lo llevamos al cementerio del pueblo y no nos permitieron enterrarlo allí, nos tocó construir nuestro propio cementerio. Fueron experiencias duras y difíciles, pero cuando se tiene el amor del Señor, uno está confiado en las victorias que nos otorga Dios.
Trabajé durante 45 años como Pastor en diferentes lugares de Colombia y pude consolidar, seis Congregaciones. Mi recomendación al nuevo liderazgo y a quienes asumen el Pastorado, es que haya entrega y servicio a los planes de Dios y siempre dar un lugar especial al Espíritu Santo”.
“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.” Mateo 28: 19-20
Red de Comunicaciones LAC - Oscar Ricardo Niño - IELCO
