La IECLB expresa “profunda consternación” ante rompimiento de represa
PORTO ALEGRE /Brasil (LWI) – La Iglesia Evangélica de Confesión Luterana en Brasil (IECLB) expresó su “profunda consternación” ante el rompimiento de una represa que contenía restos minerales de una exportadora de hierro cerca de la ciudad de Brumadinho, Estado de Minas Gerais, Sudeste de Brasil, teniendo como consecuencia que un río de lodo avanzara sobre casas y zonas rurales, dejando más de treinta muertos y 300 desaparecidos.
“Sabemos que es imposible medir el drama de las vidas arrastradas y enterradas con este desastre”, expresaron desde la Presidencia de la IECLB, señalando que no se puede “medir el sufrimiento de las personas que perdieron seres queridos”, así como quienes “esperan ansiosos por una señal de vida, o una noticia”. En ese sentido, los dirigentes de la Iglesia expresaron su “solidaridad en afecto y en oración, en palabras y acciones”.
Del mismo modo, la carta firmada por la Revda Sílvia Beatrice Genz - Pastora Presidenta y los Pastores Odair Airton Braun y Mauro Batista de Souza, Vicepresidente Primero y Vicepresidente Segundo; hicieron mención a que Dios creó la vida y lo por tanto “suplicamos que conceda consuelo y fortaleza a la red de amparo que se constituyó en muchos lugares”. “A nuestras comunidades, pedimos que oren y lleven a cabo acciones de solidaridad, a las autoridades, reivindicamos que actúen vigorosamente en los diversos ámbitos para que la asistencia sea prestada, las responsabilidades sean deslindadas y los daños mitigados”, continuaron
No sólo mostraron su preocupación por la cantidad de víctimas humanas, sino también hablaron sobre los animales y las plantas que han sido devastados con el desastre y se preguntaron sobre los impactos ambientales que habrá y señalaron que el rompimiento de una represa es causado por la intervención humana en el ambiente natural. A su vez, recordaron lo sucedido hace tres años cuando sucedió algo similar en Mariana, preguntándose “¿Qué consecuencias tendremos con estos dramas? ¿Cuánto vale la vida de las personas? ¿Cuánto vale el ambiente en el que vivimos?”.
Finalmente, señalaron que “es necesario aclarar sobre las responsabilidades del caso, juzgar y castigar de manera correspondiente”, más allá de “crear mecanismos para fiscalizar y garantizar seguridad”, así como “reafirmar nuestro compromiso con la vida y el cuidado con la creación de Dios”, destacaron. Al finalizar la declaración, citaron el Salmo 34 “Cerca está el Señor de los que tienen el corazón quebrantado” (Salmo 34, 18) y desearon que “Dios reconforte los corazones abatidos, consolide la unión y reanime en nosotros el compromiso de cuidar todo lo que fue creado por la Palabra divina”.
Red de Comunicaciones – LAC
