Décimo aniversario de la Congregación Betania – Iglesia Luterana Costarricense

Participantes de la Congregación Betania ofreciendo palabras de agradecimiento. Foto: ILCO

Carit de Puriscal/COSTA RICA (LWI), Las personas que conforman la Congregación Betania y miembros de la comunidad local han celebrado con júbilo y cantos el décimo aniversario de la iglesia el 21 de junio pasado.

Con la visita del Pastor Presidente de la Iglesia Luterana Costarricense (ILCO), Rev. Gilberto Quesada Mora, y la visita de miembros de otras congregaciones como de San Pedro y San Pablo y de la misión  en Quitirrisí, la feligresía de la Congregación anfitriona se sintió acompañada y fortalecida por la oportunidad de caminar en el ministerio de servicio por diez años y de andar en comunidad siempre guiadas por la visión del amor al prójimo como acto de amor de Dios.

La celebración fue tiempo propicio para reconocer la maravilla de Dios en su creación, de la cual toda persona en Betania forma parte. “El sol del momento nos llenó de tenue calor para celebrar, escuchar la Palabra y compartir el Pan de Vida” indicó el Rev. Quesada.

Haciendo énfasis en la urgencia de “creer en el bien que está por todas partes y que es obra del Espíritu Santo”, el Rev. Quesada motivó a las personas presentes a “seguir las señales del Espíritu y creer firmemente en su acción viva y verdadera.”

El trabajo de la Congregación Betania es integral. Se enfoca en formar un compromiso con el cuidado integral del medio ambiente y de las relaciones interpersonales. La recolección de residuos sólidos es una actividad que se lleva a cabo con la participación de la niñez.

Motivadas por la misión de “seguir a Jesús celebrando su presencia y edificando desde su Palabra, los Sacramentos y la Diaconía, las comunidades de fe acompañan a comunidades de fe excluidas, discriminadas y empobrecidas desde un enfoque integral, profético y liberador, participando en la construcción de espacios de justicia, paz e integridad de la creación como signos del Reino de Dios”, las hermanas y hermanos de la Congregación de Betania han renovado su vocación de seguir siendo esa sal en la tierra.

Como ha caracterizado a la iglesia desde tiempos antiguos, las y los participantes compartieron en la mesa, una mesa abundante en amor y comida compartida, endulzando aún más la celebración con helados y queque, elementos propios de una celebración de la Vida.

Red de Comunicaciones LAC