Carta a Relatores de la ONU en Defensa de Derechos en Guatemala
La Creación no se vende
Ginebra/SUIZA (LWI) – La Federación Luterana Mundial (FLM) comparte su preocupación sobre la situación en Zacapa, Guatemala con las Relatoras Especiales de la ONU en Derechos Humanos y Seguridad de Agua Potable y Saneamiento, de Derechos de los Pueblos Indígenas y con el Relator Especial para Defensores de Derechos Humanos.
Esta preocupación se basa en la violación al derecho al agua, por la destrucción de los acueductos y tuberías en varias localidades, las amenazas a defensores/as de derechos humanos, la intimidación, amenazas de muerte y criminalización a líderes en varias comunidades campesinas en Zacapa, Guatemala.
La Iglesia Luterana Guatemalteca (ILUGUA) ha comunicado que el 10 de Abril, “el acueducto y tanques de captación de agua de las aldeas Peralta, Matasano, Cero Grande, Cerro Chiquito y la Trementina, instaladas en las inmediaciones de las fuentes de agua en la parte alta de la montaña Granadilla, fueron destruidos”. Un segundo atentado “el 30 de abril fueron nuevamente destruidas las tuberías”. Por tercera vez, el “sábado 3 de mayo 2014 en horas de la noche o madrugada fueron destruidas nuevamente las tuberías del proyecto de agua de las comunidades La Trementina, Cerro Grande y Cerro Chiquito”. Y el 8 de mayo, por cuarta vez, “fueron destruidas nuevamente las tuberías de acueducto de la Trementina y de otras comunidades campesinas”.
Las comunidades afectadas han rechazado los actos violentos contra el derecho al agua y la vida de sus pobladores y pobladoras. Mediante carta al Ministro de la Gobernación en Ciudad de Guatemala, han exigido a las autoridades se investigue la situación y se establezca la responsabilidad respectiva. La comunidad La Trementina ha solicitado específicamente la protección del acueducto y tuberías mediante la asignación de un patrullaje permanente debido a los ataques al sistema de agua y se investigue la destrucción de los mismos.
El Secretario General de la FLM, Rev. Martin Junge, dijo que como comunión Luterana mundial “observamos con gran preocupación estos desarrollos. La comunión luterana a través de sus oficinas pertinentes está acompañando a ILUGUA en su vocación de defender los derechos al agua de las comunidades”.
El valor de la vida y del medio ambiente es de suma relevancia. El cuidado de la naturaleza y la justicia ecológica asumen prioridad en contextos donde su destrucción tiene efectos permanentes para las poblaciones y en el cambio climático. "Nuestro clamor como comunión, al prepararnos para los 500 años de la reforma, es consistente: la creación no se vende” indicó Junge. “La pertinencia de este clamor queda de manifiesto en la disputa por los bosques de La Granadilla” especificó.
Red de Comunicaciones América Latina y el Caribe
